La Isla Mínima

Muy de vez en cuando, una película española supera todas las expectativas y se convierte en un boom. Si. Es el caso de La Isla Mínima. Me atrevo a decir que es una de las mejores películas españolas de los últimos años.

La cinta cuenta la historia de Juan (Javier Gutiérrez) y Pedro (Raúl Arévalo), dos policías madrileños muy diferentes que son enviados a Sevilla a resolver un caso, la desaparición de dos jóvenes en extrañas circunstancias. Al llegar al pueblo verán que todo el mundo parece ocultar algo, todo el mundo es sospechoso. Con esta idea arranca un thriller monumental que te mantiene en tensión los 105 minutos que dura.

Aunque recuerda mucho a True Detective (los planos cenitales, la atmósfera tétrica que envuelve la película, los personajes oscuros), lo cierto es que nada tiene que ver. Aquí no hay cultos satánicos ni está presente el paso del tiempo, en La Isla Mínima hay corrupción, hay secretos reveladores y sobre todo, hay buen cine. También se muestra de una forma nunca vista antes la transición que se vivió en España a principios de los 80.

A Javier Gutierrez solo le había visto en Los Serrano y en El asombroso mundo de Borja Mari y Pocholo, por lo que no tenía muchas referencias… Ha sido más que merecido su premio al mejor actor en la última edición del festival de San Sebastian ya que su personaje es de lo mejor del año. Raúl Arévalo es uno de los mejores actores del país y aquí no defrauda. Además, están secundados por grandes como Antonio de la Torre y he descubierto a Nerea Barros, que aparte de ser una de las actrices españolas más guapas del momento, hace un papelón a la altura de sus compañeros.

Técnicamente, la película es una maravilla. De lo que he visto esta temporada, el mejor montaje, el mejor diseño de producción, la mejor fotografía y sobre todo, la mejor música, son obra de La Isla Mínima. Para que luego digan que en España no se hace cine de calidad… JA

Si tengo algún «pero» que ponerle ha sido el final. Puede que fuera porque era lunes o porque soy un poquito obtuso pero me pareció algo precipitado. Eso si, da  que pensar…

Id a verla, inmediatamente! Que merece mucho mucho mucho la pena. Alberto Rodríguez, el director de este peliculón, se ha ganado todos mis respetos.

Mi nota es un 9,5/10

Lo mejor: La ambientación y  un guión de los que hacen historia.

Lo peor: Un par de detalles finales.

G.B